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El verano llega a su fin y es momento de poner en práctica las tareas que requiere tu jardín ante los cambios estacionales que implica septiembre. Te enfrentas a un espacio verde que ha sufrido por las altas temperaturas y que necesita prepararse para el otoño.

Ahora no lo estamos preparando para un momento de crecimiento como fue la primavera, sino que queremos que afronte con bienestar y nutrientes una época de parón vegetativo. La ejecución de labores de mantenimiento sencillas conseguirá que, incluso con bajas temperaturas nocturnas, tu jardín esté sano y puedas disfrutar de él durante gran parte de la estación.

¿Quién no quiere aprovechar el otoño al aire libre? Sigue nuestros consejos para conseguir que tus espacios brillen este septiembre:

Deshazte de las malas hierbas

Septiembre es el mes más propenso a que las malas hierbas crezcan rápida y descontroladamente, por lo que tendrás que arrancarlas de tus plantas y el césped, con vistas a que el jardín esté saneado de cara a la llegada del frío.

Dedica tiempo a la poda

Presta atención a los arbustos, da forma a los setos y realiza labores de poda profunda, pues es el último mes del año que las permite. Además, es momento de retirar ramas secas y flores marchitas de tus plantas. De esta forma, ayudarás a que tus plantas se enfrenten al otoño sin nada que les robe energía.

Recolecta frutos y semillas

Si tienes un huerto, es momento de cosechar y, en su caso, hacer conservas para preservar el excedente de cara al invierno. Asimismo, recoge las semillas y mantenlas en un lugar fresco y seco hasta la llegada de la primavera.

Nutre tu jardín antes del frío

Con la llegada del otoño, tu jardín demandará abonos ricos en potasio. Aunque la aplicación de abono se irá reduciendo de manera paulatina, es importante revisar las necesidades específicas según la variedad. Sigue los consejos del fabricante o déjate aconsejar por nuestros expertos en tienda.

Planta variedades otoñales

Septiembre es la mejor fecha para plantar bulbos de otoño, de manera que florezcan antes de que acabe el invierno, llenando tu jardín de formas y colores. Tulipanes, jacintos, narcisos, fresias… elige la variedad que más te guste y ¡comienza a plantar!

Cuida el césped

Recuperar el bienestar de tu césped después del verano conlleva varias labores que requerirán esfuerzo, pero merecerán la pena una vez llegada la primavera. Tendrás que realizar una siega a baja altura para que la hierba se regenere y absorba mejor los nutrientes del abono, siempre asegurándote de no sobrefertilizar.

Protege contra plagas y enfermedades

Ya se trate de insectos o de hongos, en septiembre es vital tenerlos a raya para que tus plantas de exterior se nutran y fortalezcan de cara al frío. Recuerda siempre que la mejor forma de prevenir la aparición de estos visitantes indeseados es mejorar la calidad del suelo mediante un correcto abonado y adecuar el riego a las necesidades de la planta.

Con estos pasos, tus macetas y cultivos estarán preparados para el comienzo del otoño. Visita nuestra tienda para encontrar las herramientas necesarias para cada tarea, nuestros expertos estarán encantados de asesorarte para que tus labores sean cómodas y sin esfuerzo.

En verano, las altas temperaturas y, por ende, la subida de la humedad, producen el ambiente perfecto para que los hongos campen a sus anchas. La mayoría de los hongos que afectan a las plantas son microscópicos y ocasionan su marchitamiento, caída de hojas e incluso la muerte de la planta en cuestión de días si no se tratan.

La mejor técnica para prevenir la aparición de estos enemigos es mantener una humedad y una temperatura constante, alrededor del 60% y con máximas de 28º. No obstante, esto es algo difícil de controlar en tu jardín exterior con las subidas y bajadas bruscas de temperatura que traen las olas de calor.

De este modo, ¿qué puedes hacer para prevenir esta situación o enfrentarte a ella una vez se ha llenado tu planta?

1. Eliminar la tierra infectada

Si la presencia de los hongos es superficial, basta con eliminar las primeras capas del sustrato. Sin embargo, no es fácil establecer la profundidad de los hongos a simple vista y habitualmente lo más común es que se hayan apoderado de nuestras plantas.

Lo ideal entonces es un trasplante en condiciones: es importante que le quites al cepellón toda la tierra que puedas, siempre teniendo cuidado de no dañar las raíces. Y no olvides hacer un buen drenaje para evitar los excesos de humedad, además de esquivar riegos excesivos y la saturación prolongada de la base de las plantas.

2. Desinfectar la planta

De nada servirá cambiar el sustrato si vuelves a colocar la planta en el mismo tiesto. Recuerda que los hongos son microscópicos, por lo que no podrás darte cuenta a simple vista de su presencia.

Por este motivo, deberás lavar a conciencia el macetero con agua, jabón y bicarbonato. Tras esto, y para garantizar su total desinfección, aplica un fungicida en toda la superficie, tanto interior como exterior.

3. Limpiar las hojas

Dependiendo del hongo y el estado de la propagación, no solo encuentras moho en la tierra de tus plantas, sino que podrás verlo en las hojas, tanto en la parte superior como inferior.

Una vez hechos los pasos anteriores, bastará con retirar los hongos con un paño seco.

Además de estos consejos es importante recordar que se deben mantener las plantas bien fertilizadas para que aumente su resistencia a los hongos y las enfermedades.

A la hora de sembrar semillas o esquejes, lávate bien las manos con agua y jabón para evitar la transmisión de los hongos, y solo usa aquellos que se vean saludables, sin manchas, ni pudrición.

Con estos pasos, tus macetas y cultivos estarán preparados para cualquier ataque indeseado. Visita nuestra tienda para encontrar los mejores fungicidas, nuestros expertos estarán encantados de asesorarte sobre el tratamiento óptimo de forma que jamás te vuelva a suceder.

La iluminación de los espacios determinará la creación de uno u otro ambiente y complementará la decoración no sólo de interiores, también de jardines, terrazas, porches y áticos.

A la hora de seleccionar un tipo de iluminación u otro, habrá factores que tengamos en cuenta como los puntos de electricidad, los puntos que queramos iluminar o la intensidad.
Dentro de Agrojardín los principales productos de iluminación exterior que trabajamos son especializados para jardines y terrazas. Encontrarás los siguientes tipos.

Led colgantes para exterior

Suelen estar pensadas para espacios cubiertos, cenadores, bajo toldo, en terrazas. Requieren un punto de toma de corriente cercano, puesto que están pensadas para espacios de uso cotidiano y delimitado. No obstante es importante confiar en productos de alta resistencia al viento, humedad y a la incidencia del sol a pesar de tener una mayor protección que las balizas o aquellas destinadas a la intemperie.

Balizas o iluminación de suelo de jardín

Este producto está destinado a la iluminación del jardín, de paseos, de zonas de tránsito. Tienen una instalación eléctrica previa y requieren de toma de luz. Actualmente en el mercado se encuentran diseños tradicionales similares a farolas o bien balizas de exterior de un diseño más moderno.
La iluminación de exterior mediante balizas con la que contamos en Agrojardín están adaptadas al contacto con el agua, puesto que suelen colocarse en zonas cercanas al riego, tienen alta resistencia a las temperaturas oscilantes de exterior, la incidencia del sol y la corrosión que experimentan materiales expuestos al aire libre.

Orgánicas y naturales

Para espacios más acogedores, contamos con artículos que aportan luminosidad a pequeños espacios creando un ambiente acogedor con una iluminación muy suave y natural. Los farolillos con velas para uso exterior son un complemento para las noches de verano en jardines y terrazas. Cuentan con la comodidad de poder transportarlo de un lugar a otro y poder resguardarlo del deterioro que sufriría en su exposición continua en exteriores.

En Agrojardín, tras años de experiencia trabajando con fabricantes de lámparas colgantes de exterior, con balizas de iluminación exterior y con iluminación exterior natural, contamos solo con aquellas marcas que nos han reportado mejores opiniones y el menor número de incidencia según nuestros clientes y asesoramos en la solución que mejor se adapte a las necesidades de vuestros jardines y terrazas.

Con la llegada del calor, tu terraza y tu jardín deben estar preparados para las altas temperaturas y la fuerza del sol. Junio es la entrada oficial del verano y con él llega el momento de disfrutar de nuestros espacios verdes al fresco del final de cada tarde, pero no sin antes asegurarnos de que cuenten con la suficiente humedad y estén saneados gracias a los materiales y herramientas que puedes encontrar en Agrojardín.

Aumenta el riego

Es el momento de acortar la frecuencia de riego para que el aumento de las temperaturas no perjudique a nuestras plantas. Procura que la tierra nunca esté seca del todo y ajusta el riego a cada planta para prevenir la aparición de plagas y enfermedades.

• Para tus plantas de interior – riega cada dos o tres días, en función de la humedad de la tierra, siempre a primera hora de la mañana o a última de la tarde.
• Para tu jardín exterior – por norma general, será necesario regar cada mañana, sobre todo si las temperaturas ya son elevadas y no hay lluvias, aunque no debes regar en exceso.

En caso de pasar las vacaciones fuera de casa, lo ideal es utilizar productos como geles, o planificar riegos automáticos, dependiendo del tiempo que tus plantas vayan a estar solas.

Momento de sanear tus cultivos

Dedica parte del tiempo a eliminar las ramas secas y enfermas, al igual que los chupones de arbustos y rosales, para que las plantas crezcan fuertes y sanas. Además, puedes plantar petunias, dalias, begonias, clavelinas o girasoles, que florecerán durante el verano.

• Para tus plantas de interior – céntrate en eliminar las flores secas y las ramas muertas.
• Para tu jardín exterior – quita las malas hierbas de los macizos y reduce el volumen de las plantas trepadoras.

El elemento estrella: el abono

Este mes tendremos que abonar tanto las plantas de interior como las de exterior, al encontrarnos en época de crecimiento. Abonaremos nuestras plantas de exterior con cuidado de no quemarlas e incorporaremos fertilizante líquido a nuestras plantas de interior.

• Para tus plantas de interior – remueve la superficie de las macetas para retirar restos vegetales y aportar nuevo sustrato por encima.
• Para tu jardín exterior – abona regularmente para asegurarte de que las flores reciben los nutrientes adecuados.

Protege contra golpes de calor

Las temperaturas elevadas y la fuerza del sol del verano son siempre una amenaza para la vida de tus jardines. Un golpe de calor puede acabar con una planta rápidamente, sobre todo si es herbácea, la más sensible a sus efectos.

A veces, aunque el sustrato esté húmedo, la velocidad de la pérdida de agua por las hojas es mayor que la absorción por las raíces. El problema se agrava cuando la humedad ambiental es baja. Para revertir sus efectos, hidrata y refresca la planta lo antes posible con riego y pulverizaciones de agua. La clave está en riegos cortos, pero frecuentes.

Con estos consejos, tus espacios estarán preparados para los días largos de sol y buen tiempo. Ahora siéntate y disfruta del fenómeno de explosión vital y floral que ofrece un jardín cuidado.

Sigue nuestros consejos para conseguir que tus jardines brillen esta primavera

Es hora de poner a punto tu terraza y sentarte a disfrutar del buen tiempo. Juega con tu creatividad y apórtale una ornamentación diferente a tu jardín de cara al verano. Quita hojas enfermas, secas o mustias, rastrilla y limpia tu jardín. Coloca nuevas plantas y llena tu espacio verde con una explosión de color con los materiales y herramientas que puedes encontrar en Agrojardín.

Presta atención al riego

Con el aumento de las temperaturas, nuestras plantas inician su fase de crecimiento, por lo que conviene aumentar la frecuencia del riego, mantenerlo constante y adecuarlo a cada una de las plantas.

Lo habitual es que riegues cada tarde o cada dos tardes, procurando que la tierra nunca esté seca del todo. Ajustar el riego a las necesidades de cada planta es muy importante para prevenir la aparición de plagas y enfermedades.

• Para tus plantas de interior – deja que el sustrato se seque entre riegos para evitar pudriciones. Las plantas con flor necesitan mayor aporte de agua, pero es importante no encharcar.

Para tu jardín exterior – utiliza jardineras o recipientes que drenen bien el agua y no olvides regar de manera abundante tus plantas aromáticas.

Momento de sanear tus cultivos

Mayo es el mes por excelencia para podar tus setos y conseguir que los nuevos brotes crezcan mejor. Además, dedica parte del tiempo a eliminar las ramas secas y enfermas, al igual que los chupones de arbustos y rosales, para que las plantas crezcan fuertes y sanas aprovechando las buenas condiciones primaverales.

• Para tus plantas de interior – céntrate en eliminar las flores secas y las ramas muertas.

Para tu jardín exterior – quita las malas hierbas de los macizos y poda los setos, dejando más ancha la zona inferior que la superior para que soporte bien los vientos y otros accidentes.

El elemento estrella: el abono

Busca un sustrato que cuente con una estructura y textura adecuadas, siempre teniendo en cuenta que no necesita lo mismo una planta que vive en un tiesto que otra que crece en el suelo. Esta es una tarea que exige atención, ya que tanto la carencia como el exceso tienen consecuencias negativas para las plantas. Ajusta las dosis según las recomendaciones del fabricante y suminístralas cuando se indique.

• Para tus plantas de interior – remueve la superficie de las macetas para retirar restos vegetales y aportar nuevo sustrato por encima.

Para tu jardín exterior – abona regularmente para asegurarte de que las flores reciben los nutrientes adecuados. Aprovecha también para instalar guías en las plantas altas.

Protege contra plagas y enfermedades

Para prevenir problemas en la salud de tus plantas, debes aplicar tratamientos insecticidas contra el pulgón, la cochinilla y otros insectos cada 15 días. Además, la mejor forma de prevenir la aparición de estos visitantes indeseados es mejorar la calidad del suelo mediante un correcto abonado y adecuar el riego a las necesidades de la planta.

En el caso de las plantas de interior, será también necesario que las saques de vez en cuando, pero siempre a la sombra para que tomen el aire sin quemarse.

Con estos consejos, tus espacios estarán preparados para los días largos de sol y buen tiempo. Ahora siéntate y disfruta del fenómeno de explosión vital y floral que ofrece un jardín cuidado.